jueves, 8 de julio de 2010

LABORATORIO Y DIAGNÓSTICO DE INFECCIONES MICÓTICAS


Recomendaciones para la recolección de muestras para cultivos de hongos (American Thoracic Society).




Piel, uñas, cabellos: La zona de la piel donde se tomará la muestra debe limpiarse con alcohol al 70% para eliminar los contaminantes bacterianos de la superficie cutánea. Las muestras de lesiones periféricas eritematosas que crecen por los bordes de la típicas "tiñas", se descaman con el borde de un porta objeto de vidrio o el borde una hoja de bisturí. Las muestras de uñas infectadas deben tomarse por debajo de la uña para obtener material blando de lecho ungueal. Si esto no es posible, se raspa fuera de la superficie de la uña antes de recolectar raspados de las porciones más profundas. Los cabellos se recogeran a partir de las áreas descamativas o de alopecia, o aquellos que fluorescen cuando se les observa bajo la lámpara de Wood de luz ultravioleta.



Exudados: La piel que recubre las regiones pustulosas debe desinfectarse y los exudados se aspiran con aguja y jeringa estériles. La jeringa también sirve como transporte si se tapa la aguja. Puede ser necesaria la biopsia de la lesión, si el aspirado fracasa en la recuperación de los hongos.



Los raspados de piel, los fragmento de uñas y pelos pueden trasladarse en un sobre, placa de petri u otra forma conveniente.



Procesamiento de la muestra: La muestra debe examinarse a la brevedad. Es preciso realizar preparaciones directas y transferir una porción de la muestra a un medio de cultivo adecuado para hongos.




Examen directo: Es recomendable que el examen microscópico directo se realice sobre la mayor cantidad de muestras remitidas para cultivo de hongos. ya que puede proporcionar no solo un diagnóstico presuntivo, sino también una ayuda en la selección del medio de cultivo apropiado.




Presunción de identificación de los hongos sobre la base del examen microscópico directo del material proveniente de las muestra clínicas.




Observación microscópica directa

Hifas de tamaño regular, relativamente pequeñas (3-6 micras), ramificadas de manera dicotómica en ángulos de 45° con tabiques transversales evidentes. Pueden ser especies de Aspergillus



Hifas de tamaño irregular que van de 6-50 micras, similares a cintas y carentes de tabiques. Rhizopus-Mucor Absidia



Hifas pequeñas (2-3 micras) y regulares, algunas ramificadas con observación ocasional de artrosporos rectangulares, solo se encuentran en piel raspados de uñas y cabellos. Grupo de los dermatofitos: Especies de Microsporun, Trichophyton o Epidermophyton



Hifas de diámetro regula, 3-6 micras, de paredes paralelas, ramificaciones irregulares, tabicadas, amarillos oscuro, marrón o hialinas. Especies de: Phaeoyphomyces o Hyalohyphomyces



Hifas con puntos de estrechamiento evidentes que simulan una ristra de salchicha(seudohifas); con frecuencia se observan formas levaduriformes brotantes (blastosporos). Especies de Candida


Formas levaduriformes, células esféricas y de tamaño irregular (5-20 micras) clásicamente con

cápsula gruesa polisacárida (no todas las células son capsuladas), con uno o más brotes unidos por un estrechamiento angosto. Criptococcus neoformans o Especies de Criptococcus no capsulados



Pequeñas levaduras brotantes, relativamente uniformes en tamaño con un solo brote unido por una base angosta, extracelulares o dentro de macrófagos. Histoplasma capsulatum



Formas levaduriformes grandes (8-20 micras) con células que parecen tener una pared gruesa, de doble contorno, con un solo brote unido por una base amplia. Blastomyces dermatitidis



Esférulas de pared gruesa, grandes, de tamaño irregular (10-50 micras), muchas de las cuales pueden tener endosporos pequeños (2-4 micras), redondos. Coccidioides inmitis


Normas para el examen directo y el procesamiento de las muestras remitidas para cultivo de hongos


Piel, uñas y cabellos: Las escamas de piel, raspado de uñas y pelos, deben examinarse después del tratamiento con KOH al 10%. Las preparaciones con KOH se hacen emulsionando la muestra en una gota sobre un portaobjeto. El propósito del KOH es aclarar cualquier escama del fondo o membrana celulares que puedan confundirse con elementos de las hifas. El aclaramiento puede acelerarse si la mezcla se calienta con suavidad sobre la llama de un mechero Bunsen. Se aplica un cubre objeto y la muestra se examina para ver la presencia de hifas regulares angostas. Cuya característica es fragmentarse en artroconidias. En el caso de pelos pueden verse la disposición de los esporos en forma de mosaico sobre la superficie del tallo ( infección ectotrix) o pueden verse fragmentos de hifas o artroconidias en la parte interna (infección endotrix).




Las escamas de piel, raspados de uña y pelos deben colocarse de manera directa sobre las superficie de un medio de cultivo como agar Mycosel. Con un asa recta de alambre, se sumergen unos cuantos fragmentos en el agar. Se examinan las áreas de inoculación a intervalos frecuentes para observar la aparición de las colonias en la superficie. Los cultivos se mantienen por un mínimo de 30 días antes de descartarlos como negativos.




miércoles, 7 de julio de 2010

CLASIFICACIÓN DE LAS MICOSIS DEL SER HUMANO




Los enfoques tendientes a agrupar las enfermedades micóticas sobre la base de su sitio de compromiso ya no pueden diferenciarse más en las categorías clásicas, como erán; "profundas" o "sistémicas", "subcutáneas" y "superficiales". Ya que por ejemplo el agente micótico Malassezia furfur, que antes sólo producía dermatomicosis superficial de la tiña versicolor, actualmente es un agente de infecciones diseminadas en pacientes que reciben alimentación parenteral mediante catéteres permanentes.


Los términos profunda o sistémica se refirieron a un grupo de infecciones micóticas producidas por agentes que pueden ser muy virulentos, e invadir con profundidad los tejidos y órganos, además de tener la capacidad de diseminarse por todo el organismo. Desde una perpectiva clásica la mayoria de estas infecciones fueron producidas por hongos dimórficos; es decir aquellas especies que existen en forma filamentosa en el ambiente (incubación a temperatura ambiente), pero como formas levaduriformes cuando se incuban entre 35° y 37°C (temperatura corporal). Actualmente debido al aumento de personas inmunosuprimidas, otros agentes micóticos considerados sólo como "contaminantes" provocan enfermedades sistémicas. Un ejemplo es el hongo hialino Penicillium marnettei, que produce una infección reticuloendotelial clínicamente diseminada. Por otro lado ciertos agentes de micosis profundas, en especial Blastomyces dermatitides e Histoplasma capsulatum, pueden producir infecciones primarias cutáneas y subcutáneas sin evidencia de diseminación.


El término oportunista se utiliza para cualquier hongo no patógeno que pueda producir infecciones subcutáneas y diseminadas. Se trata de agentes de virulencia intrínseca baja o limitada que pueden producir enfermedad local o diseminada en individuos debilitados.



Los micologos actuales deben aceptar que una variedad de especies puede producir virtualmente todas las formas clínicas de micosis y que es necesario el aislamiento del agente etiológico para establecer el diagnóstico. Se sugirieron los términos genéricos y globales feohifomicosis y hialohifomicosis para designar aquellas micosis producidas por hongos que aparecen oscuros o negros o por aquellas especies que producen hifas incoloras, transparentes (hialinas) respectivamente.